Como no podía ser de otra manera, aquí tenemos el anuncio sexista del verano. Y mis queridas alumnas me dirán que es un bonito anuncio en el que este chico tan guapo se come un inocente yogur... Si fuera una guapa chica hablaríamos de discriminación, y del mismo modo lo haremos por ser un chico. Para que nos comamos un yogur no es necesario que un hombre se ponga a hablar de forma sexual utilizando dobles sentidos como la palabra "yogurazo", tumbado y luciendo su palmito. Para que comamos un yogur no es necesario que nos seduzcan, solo es necesario ofrecer un buen producto y a un buen precio para el consumidor. Sin embargo, los anunciantes siguen obcecados en ofrecernos un chico de compañía en lugar de un alimento. Viendo el anuncio, tenemos información sobre los compradores potenciales, ¿son mujeres? Si queremos igualdad y respeto no podemos permitir que un hombre sea utilizado como carne para vendernos nada, igual que no lo permitiríamos de una mujer. ESpero algún coment...